Arranca la abstinencia: ¿Funes se quedó sin cigarrillos?

Problemón para los fumadores, alivio para los anti tabaco. Si bien la falta de cigarrillos puede parecer una buena noticia, para quienes sufren una adicción al tabaco es un problema no menor que se suma al aislamiento obligatorio y sus complicaciones derivadas.

Para quienes tenían pensado en dejar el mal hábito de fumar, esta es su oportunidad. La falta de cigarrillos ya es un hecho en Funes, y se estima que aun cuando se reactive de a poco la producción en las tabacaleras, la distribución y compensación de faltas demorará un tiempo más, algunas semanas al menos.

“Ya hace dos semanas que no están entregando ni cigarrillos ni tabaco para armar, porque aún habiendo, no hay etiquetas por parte de la Afip para etiquetarlos”, explica Pablo Oreo, distribuidor y comerciante de la ciudad. “Creo que todos los kioskos y los que distribuimos tabaco ya nos quedamos sin mercadería, desde hace tres semanas vendíamos hasta tres atados de cigarrillo por persona, pero ahora ya no hay”, agregó.

El problema que se suma es el mal humor de la gente. El comerciante explicó que tanto él como quienes trabajan en el local notan que el clima “se está poniendo muy intenso”. “Es por demás de preocupante, se generan muchos choques porque piensan que es uno el que no quiere vender y realmente vendimos todo lo que teníamos, la situación se pone difícil”, contó. Claro, los kioskeros son la primera línea de contención ante un fumador en abstinencia.

Oreo explicó que durante el último mes tuvieron que arreglárselas con el propio stock del comercio, que en tiempos de “normalidad” rinde entre seis y ocho meses para renovar góndolas mientras se espera un nuevo pedido. Ese stock, sin entrega de proveedores, se hizo humo, literalmente, en un mes. A la fecha, ya no quedan atados de ninguna marca, sólo restan algunos paquetes de tabaco para armar al que no le dan mucho tiempo de vida.

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